miércoles, 22 de febrero de 2012
ÉPOCA INDÍGENA
Lo cierto es que América estaba poblada por una variedad de culturas, -de símbolos, de tradiciones, de costumbres, de artes, de conocimientos y saberes...-, que fueron ignoradas, menospreciadas y destruidas, en su gran mayoría, por los invasores que llegaron de Europa con su afán de riqueza, de dominación y con sentimientos de una ilusoria superioridad.
Los estudios realizados sobre la denominada por algunos época de la conquista y por otros la gran invasión, concuerdan en afirmar que la población indígena fue diezmada, casi a desaparecer en un 90%. Así se cometió uno de los actos más bárbaros en la historia de la humanidad: murieron hombres y mujeres indígenas y con ellos, la mayor riqueza que dejan los hombres en su transcurrir: la cultura plasmada en los conocimientos y los saberes.
El régimen colonial se caracterizó por un gran descenso de la población indígena tanto por su extinción física como cultural debido, por una parte, a los trabajos forzados a que eran obligados como cargueros, bogas o mineros; por otra parte, las enfermedades desconocidas que los aniquilaron sin poder oponer resistencia; y, por último, el afán de “civilizarlos” de incorporarlos o asimilarlos a la cultura del opresor, intimidando su dignidad y con ello sus posibilidades de expresión del pensamiento.
HISTORIA INDIGENA: La Conquista y Colonización Europea
La irrupción de Europa en el continente americano a partir del siglo XVI modificó de manera abrupta la vida de los pueblos indígenas. Al momento de la conquista, iniciada en territorio de lo que hoy es Colombia con la expedición de Rodrigo de Bastidas, los pueblos indígenas tenían una distribución y desarrollo desigual.
En la península de la Guajira un complejo cultural Arawak dominaba el territorio; en la Sierra Nevada de Santa Marta la confederación de los tairona agrupaba distintos pueblos de habla Chibcha y sobre el litoral Atlántico se asentaban numerosas comunidades Caribe. Al occidente, dominando el Atrato, estaban los tule, sobre el Darién los cueva y sobre los ríos Sinú y San Jorge una densa población Zenú.
En la costa Pacífica los pueblos chocó estaban distribuidos a lo largo de todo el territorio mientras que en el noroeste andino se encontraban pueblos, probablemente Caribe, como los pozo, carrapa, nutibara y arma. En los actuales departamentos de Caldas y Quindío los anserma y los quimbaya agrupaban poderosas confederaciones y en Santander, caribes del pueblo Yariguie dominaban la olla del Magdalena junto a los opón y carare. Allí también se encontraban los barí y los chitará, y en la frontera con los muisca el pueblo chibcha de los guane. En el altiplano de Cundinamarca y Boyacá estaba la nación Muisca, la más numerosa hallada por los conquistadores.
ÉPOCA HISPÁNICA:
Con la llegada de los Conquistadores españoles al territorio de la actual Colombia hacia el año 1500, entra en la región un nuevo factor poblacional que alteró completamente el anterior panorama que se había venido desarrollando entre los pueblos indígenas. Con la llegada al territorio de los Muiscas se inició un proceso de conquista y sojuzgamiento. A medida que los españoles fueron avanzando construyeron varios asentamientos y dispusieron un nuevo ordenamiento del territorio de acuerdo a los intereses de cada grupo conquistador. Dicho ordenamiento respondía a los recursos que se encontraban en los asentamientos, proceso en el cual generalmente no se tuvo en cuenta la opinión de los pueblos que habitaban allí. Estos establecimientos continuaron en los siguientes tres siglos con un proceso de expansión guerrera y colonizadora, introduciendo además un gran número de población negra africana como mano de obra esclava, avanzando sobre las poblaciones indígenas y de palenqueros que se vieron sometidos a periódicos desplazamientos.
En el año 1499 el navegante español Alonso de Ojeda llegó a las costas del norte de Colombia (Cabo de la Vela) acompañado de Américo Vespucio quien nombraría la tierra firme con el actual nombre en honor a Cristóbal Colón. En 1501 Rodrigo de Bastidas recorrió la costa entre La Guajira y Cartagena y descubrió el río Magdalena. En 1510 Alonso de Ojeda fundó a San Sebastián de Urabá, la primera población española en Tierra Firme, pero ese mismo año su gobernante provisional, Francisco Pizarro, decidió abandonarla y se trasladaron a un sitio en el golfo de Urabá donde fundaron bajo la dirección de Martín Fernández de Enciso a Santa María la Antigua del Darién. Esta ciudad, que fue capital de la primera gobernación española en la zona Castilla del Oro, fue a su vez abandonada en 1517. Con Santa Marta (1525) y Cartagena de Indias (1533), se estableció el control español de la costa. El conquistador Gonzalo Jiménez de Quesada conquistó una vasta área en la región derrotando a la poderosa cultura Chibcha, fundando la ciudad de Santa Fe de Bogotá y nombrando la región Nuevo Reino de Granada.
ÉPOCA REPUBLICANA:
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